El artista se debe educar y ahondar en su propia alma, cuidarla y desarrollarla para que su talento externo tenga algo que vestir y no sea como un guante perdido de una mano desconocida, un simulacro de mano, sin sentido y vacío. Vasili Kandinski 

Con una amplia experiencia en el quehacer pictórico, Ana Moreno mientras pinta se reinventa de continuo, tal pareciera que los temas, colores, técnicas y estilos que pasan por sus lienzos son de posibilidades infinitas, que no se repiten por más que ella pinte una y otra vez, así como cuando imparte clases de pintura, por ello en esta exposición, Los tiempos, Ana se redescubre al tiempo que reafirma su lirismo pictórico.

¿Será que estas voces pictóricas provienen de muy dentro de ti, desde demasiado dentro?

“Estoy gozando con todo el color y texturas, y sensaciones e impresiones que en parte me rodean pero creo que más me inundan por dentro, ahora sí puedo también decir que no me intereso tanto por lo que veo, sino lo que me he permitido procesar y sólo expresar sin llegar incluso a buscar formas, ni imágenes que conocía…”.

Y hete aquí, degustando las propiedades emocionales de cada tono, de cada color y de cada textura, sin interesarte por las formas sino sólo lo que fluye de tu ser, por ello asumes un distanciamiento del figurativismo, o quizás por ello simplemente transitas cada vez más en senderos de abstracciones, donde tu espíritu va a su libre albedrío, sin ocuparse ni preocuparse de teorías y dogmas de la teoría del arte; llegas así a una síntesis de pensamientos volcados en esta serie.

“Disfruto tanto los tiempos, las épocas, las temporadas que simplemente hay que decidir cómo vivir, es por eso que estoy trabajando con series que les llamo Los tiempos, porque para todo hay un tiempo, para llorar, para gozar, para pensar, para soñar, para reír, para callar... y mi tiempo hoy es de juego, de color, ¡de libertad!

Juan Alberto Hernández Ortiz