CDMX/ El gobierno de México espera que esta misma semana Estados Unidos responda a la solicitud para excluir al país del arancel del 50% que Washington impuso el pasado 3 de junio a las importaciones de acero y aluminio, informó este martes el secretario de Economía, Marcelo Ebrard.

En declaraciones a medios tras participar en la presentación de la edición impresa de la Revista del Consumidor, de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Ebrard detalló que durante su visita a Washington la semana pasada, el equipo negociador mexicano presentó una serie de argumentos a sus contrapartes estadounidenses para sustentar la petición de México.

El primer argumento, explicó, es que Estados Unidos mantiene un superávit comercial con México en el sector del acero, por lo que aplicar aranceles en este rubro “es bastante discutible”.

“El segundo punto es que ya se han hecho excepciones, como en el caso del Reino Unido. Lo que estamos pidiendo es que se nos aplique el mismo criterio”, añadió el titular de Economía.

Como tercer argumento, Ebrard señaló que esta medida podría afectar el empleo en ambos países, dado el alto grado de integración económica entre México y Estados Unidos. “Todo el daño que esta medida nos genere aquí va a tener una repercusión allá”, afirmó.

El secretario subrayó que la petición se entregó formalmente el pasado viernes, y que el gobierno mexicano está ahora a la espera de una respuesta oficial de Washington.

Cuestionado sobre si las actuales protestas en Los Ángeles, protagonizadas por comunidades migrantes en rechazo a políticas antimigratorias impulsadas por Donald Trump, podrían afectar las negociaciones comerciales, Ebrard descartó una relación entre ambos temas.

“Ya la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, fijó la postura de nuestro gobierno: no se está a favor de ningún tipo de provocación ni del uso de la violencia, pero sí se debe proteger a las personas y sus derechos”, concluyó.