Los Ángeles, California/ Una ola de protestas se desató este viernes en el centro de Los Ángeles luego de que autoridades federales de migración ejecutaran la redada más grande registrada en décadas en esta ciudad santuario, generando fuertes críticas por el uso de fuerza excesiva, detenciones arbitrarias y tácticas de intimidación contra la comunidad migrante.

Según organizaciones defensoras de derechos humanos, al menos 45 personas fueron arrestadas en distintos puntos de la ciudad sin contar con órdenes judiciales. Entre los lugares donde se realizaron los operativos se encuentran dos establecimientos de Home Depot, una tienda en el Distrito de la Moda y un expendio de donas.

Los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) emplearon rifles de estilo militar, granadas aturdidoras y equipo táctico para dispersar a las personas que se congregaron en protesta. Videos grabados por transeúntes y medios locales mostraron escenas de caos: migrantes esposados y escoltados por estacionamientos antes de ser subidos a camionetas blancas bajo custodia federal.

“Estas acciones no sólo son ilegales, son inhumanas. Estamos hablando de detenciones sin orden judicial en plena luz del día, en espacios públicos. Esto no es seguridad, es terrorismo de Estado”, denunció Angélica Salas, directora de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes en Los Ángeles (CHIRLA), durante una conferencia de prensa.

La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, expresó su indignación: “Como alcaldesa de una ciudad orgullosamente migrante, estoy profundamente consternada. Estas tácticas siembran terror en nuestras comunidades y violan los principios básicos de seguridad y convivencia”. Asimismo, reiteró que Los Ángeles continuará siendo una ciudad santuario, reafirmando su negativa a colaborar con operativos migratorios federales.

La redada se enmarca en un contexto de endurecimiento de las políticas migratorias promovidas por la administración Trump, en la que el exsubjefe de gabinete Stephen Miller afirmó recientemente que el objetivo es alcanzar un mínimo de 3,000 arrestos diarios a nivel nacional.

En redes sociales, usuarios reportaron que se organizaron mediante la plataforma Reddit para alertar sobre la presencia de agentes y tratar de impedir detenciones en el condado de Los Ángeles. La acción comunitaria se produce después de que el concejo municipal votara por unanimidad declarar oficialmente a la ciudad como santuario.

Deportados en condiciones inhumanas en Yibuti

En un giro aún más alarmante, documentos judiciales revelaron que migrantes deportados —incluidos un mexicano y un cubano acusados de crímenes graves— se encuentran detenidos en un contenedor convertido en sala de conferencias dentro de una base naval estadounidense en Yibuti, África.

De acuerdo con el juez de distrito de Boston, Brian E. Murphy, la deportación fue realizada de forma ilegal por la administración Trump. Los detenidos enfrentan condiciones insalubres, expuestos a enfermedades respiratorias, riesgo de malaria y ataques de grupos armados hutíes. Se reporta que han sido forzados a consumir medicamentos preventivos y viven bajo constante vigilancia del ICE.

Los casos han provocado un nuevo llamado de atención a las condiciones en que las autoridades estadounidenses tratan a migrantes deportados, sumando presión sobre una estrategia migratoria cada vez más criticada tanto a nivel nacional como internacional.