CDMX/ Este sábado, la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) decidió poner fin al paro de labores y retirar el plantón instalado en la Ciudad de México desde el pasado 15 de mayo, tras una votación interna que reflejó una división casi equitativa entre las bases magisteriales.

Con 5,555 votos a favor de suspender la movilización y 5,298 en contra, la diferencia de apenas 257 sufragios evidencia un empate técnico entre quienes optaban por continuar con las protestas y aquellos que eligieron pausarlas.

El movimiento inició el 15 de mayo con demandas centrales como la abrogación de la reforma de pensiones de 2007 y un incremento salarial del 100%. Durante las últimas dos semanas, el paro laboral y las acciones de protesta, incluyendo bloqueos en puntos estratégicos como el Palacio Nacional, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), la SEP, la SHCP y el INE, generaron afectaciones significativas a la movilidad capitalina, obligando a la ciudadanía a modificar sus rutas y horarios de desplazamiento.

La dirigencia de la Sección 22 informó que el resultado de esta consulta será presentado ante los delegados de la Asamblea Nacional Representativa (ANR), quienes evaluarán las siguientes fases de la estrategia del movimiento magisterial.

En respuesta al conflicto, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró que su gobierno ha sostenido diálogo con el magisterio y ha atendido varias de sus demandas; sin embargo, reconoció que ciertas exigencias no pueden cumplirse por limitaciones presupuestales.

Por su parte, la CNTE ha expresado que las propuestas gubernamentales no resuelven de forma estructural los problemas que aquejan al sector educativo, por lo que no descartan futuras movilizaciones si no se logra avanzar en sus planteamientos de fondo.

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Contexto de la demanda sobre la reforma de pensiones de 2007

Entre los principales reclamos de la CNTE destaca la exigencia de derogar la reforma al sistema de pensiones del ISSSTE implementada en 2007. Dicha reforma transformó el modelo solidario de jubilación hacia un esquema de cuentas individuales administradas por Afores, lo que, según el magisterio, ha vulnerado los derechos laborales de los trabajadores del Estado.

Algunos de los cambios más controvertidos de dicha reforma incluyen:

• Transición a cuentas individuales, donde las pensiones dependen del ahorro acumulado, en lugar del último salario y años de servicio.

• Incremento en la edad de jubilación de 58 a 65 años para nuevos trabajadores a partir de 2007.

• Uso de la UMA en lugar del salario mínimo como base de cálculo para las pensiones, lo que ha reducido los montos percibidos.

• Administración privada de los fondos, lo que ha generado preocupación sobre la seguridad y rendimiento de los ahorros.

La CNTE insiste en que la derogación de esta reforma es fundamental para garantizar condiciones de retiro dignas y justas para los trabajadores del sector público.