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Mtro. Cuitláhuac García Jiménez,
El rezago de educación superior de Veracruz es real, y no se ha abatido ni intentado que Veracruz salga de los últimos lugares con Oaxaca y Chiapas, por eso el problema que tengo como Director de la Licenciatura en Ciencias Políticas de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, oferta educativa que construimos con un grupos de académicos y docentes veracruzanos desde el 2005, y ofrecida formalmente como UPAV en el año 2009, resulta un reflejo del descuido e intolerancia de las autoridades encargadas de las instituciones de educación superior, y en éste caso de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, siendo no tan sólo la administración rectora de la UPAV un obstáculo para la labor esencial de los directores, docentes de la UPAV, y la consecución de la excelencia académica de la UPAV, sino ustedes mismos, como gobernador del estado de Veracruz, puesto que es Usted el presidente de la Junta de Gobierno de la UPAV, y Usted Secretario de Educación de Veracruz que funge como secretario de la Junta de Gobierno de la UPAV, quienes nunca han ejercido la escucha a la diferencia democrática en la UPAV para enriquecer el diálogo y el pensamiento sobre la educación social de la UPAV, quienes nunca le han pedido un informe de labores de estos últimos casi 5 años a la rectoría de la UPAV para cerciorarse que sólo se han dedicado a suscribir convenios, más de 80, sin resultados ni una acción concreta que beneficie a la comunidad universitaria, dejando a un lado la actualización de los programas y planes de estudios, la concreción de los ejes fundamentales de la UPAV como toda universidad pública, la articulación de la educación, investigación y extensión, la capacitación y actualización de los docentes de la UPAV, la precariedad laboral de los mismo, la falta de apoyo a la titulación, la simplificación administrativa, y un largo etc., quienes han permitido la opacidad en el manejo de los recursos de la UPAV, administrada financieramente por una ilegal outsourcing que cada rato cambia de nombre, y que ha cercenado los derechos laborales de sus docentes y ha permitido la corrupción.
Por lo que una vez más acudo ahora mediáticamente a ustedes, puesto que no he recibido respuesta a un oficio que les dirigí el 11 de septiembre como máximas autoridades de la UPAV, presidente y secretario respectivamente de la Junta de Gobierno, del problema grave que tengo como Director de la Licenciatura en Ciencias Políticas que honrosamente fundé y coordino con la administración rectora de la UPAV.
Por eso una vez más vuelvo a presentárselo y describirlo:
Ante la negativa de la rectoría de dejarme, como Director de la Licenciatura en Ciencias Políticas, de abrir una nueva generación de alumnos de dicha oferta educativa, por cierto, aun cuando cubría la cuota que han impuesto que abramos nueva generación con un mínimo de 15 alumnos, coercitiva condición que niega el derecho de todo veracruzano a la educación, puesto que si el director sólo junta 14 alumnos estos no podrán estudiar dicha oferta educativa, y pese a que la sostenibilidad del grupo de nuevos alumnos se puede dar con 7 alumnos, dado que el cobro del cuatrimestre o semestre de cada uno de los alumnos son suficientes para pagarles a los docentes, aprovecho para decirles que la rectoría no pone ni un peso para pagarle a los docentes, y los excedentes de dichos cobros a los alumnos no son transparentados por la administración financiera ilegal de la outsourcing, además que no pueden argumentar que los excedentes de los ingresos propios que se generan por las cuotas de los alumnos y el cobro que le hacen de la certificación de las más de 50 escuelas particulares asentadas no sólo en Veracruz sino también en otros estados, incluso fuera de México, son para el pago del salario del personal administrativo, puesto que estos están asegurados por el presupuesto que otorga el gobierno estatal año con año a la UPAV, éste año 2023 son alrededor de 35 millones de pesos; como les iba contando, los directores sin apoyo de difusión de la UPAV tenemos que hacer nuestro labor de promoción para juntar a los alumnos e inscribirlos, así que en mi caso, sin tener el más mínimo justificante académico, escolar (me acusaba la rectoría que debo documentos de alumnos, y les demostré que no es así en una junta con la jefa de control escolar y el coordinador de Xalapa de la UPAV, teniendo ahora en mi poder los acuses de recibidos de la documentación de los alumnos que se me negaban anteriormente) me niegan inscribir a una nueva generación de alumnos, así que ante esa acoso y represarías a mi persona como Director de la Licenciatura en Ciencia Políticas y a los alumnos de nuevo ingreso, les informo que voy a iniciar las clases de la nueva
generación de ciencias políticas bajo protesta, y paralelamente, si no hay respuesta por parte de ustedes, iniciaré un juicio jurídico contra la rectoría, la directora de educación superior, la jefa de control escolar y el coordinador de Xalapa por negar el derecho a veracruzanos y veracruzanas de estudiar, además por represarías y acoso, puesto que en lugar de resolver y atender un trámite legal y justo que como director hago de matricular a nuevos alumnos, me enviaron al coordinador de Xalapa de la UPAV a pedirme “la renuncia” de forma verbal, sin expresar algún justificante académico, escolar, financiero o legal, y sin un oficio donde se justifique tal petición, logra sólo decir una autoritaria justificación de que era emisario, cuando le pregunté cuál era la justificación, al coordinador de la UPAV en Xalapa, lo único que me dijo que eran “órdenes superiores”. Ante ese surrealista y vulgar “grilla” le dije que no iba a renunciar porque no había ningún justificante profesional ni legal.
El acoso y las represarías que he vivido sé que fueron motivados desde el primer momento en que me pronuncié por una Reforma Integral de la UPAV para dotarla de Autonomía Académica, Administrativa y Jurídica como todas las universidades públicas, y con esto salvarla del control político que ha vivido, primero del PRI, después del PAN, y ahora de MORENA, embadurnada su papelería (logos y títulos) de rojo primero, azul después, y ahora de guinda, y pedirle al gobernador como presidente de la Junta de Gobierno que abriera un proceso democrático para elegir al rector de la UPAV al vencimiento del período del rector actual y su respuesta fue verlo ratificarlo.
Represalias que comenzaron justo en esa fecha de ejercer mi libertad de opinar, pues fui inmediatamente despedido por la ilegal outsourcing que administra de forma opaca los recursos de la UPAV y administra sin respetar los derechos laborales de los trabajadores de la UPAV, en mi caso fui despedido como coordinador de investigación, que por cierto, nunca me permitieron aplicar más de 30 proyectos académicos y educativo para la mejora de la calidad educativa de la UPAV, como crear el área de investigación, planificar un centro de capacitación de los docentes de la UPAV, dotar a los estudiantes de reservorios bibliográficos, pues desde hace 12 años somos la única universidad pública que no tiene bibliotecas, o cuando menos, por el modelo educativo flexible semipresencial, los reservorios bibliográficos. etc.
Por lo anterior, les pido como máximas autoridades de la UPAV que la administración rectora que ustedes pusieron inscriban inmediatamente a los alumnos de nueva generación puesto que no hay ningún justificante, que paren las represarías por ejercer mi libertad de expresión sobre la UPAV, así como la obstaculización a mi labor académica, administrativa y educativa como Director de la Licenciatura en Ciencias Políticas, y si quieren mi renuncia háganla por escrito firmada por el rector de la UPAV, donde la justifique racionalmente y poder darlo conocer a los veracruzanos, y si me permiten una recomendación, hagan del poder algo horizontal y escuchen a todas las voces de la comunidad universitaria de la UPAV.
Dr. Lenin Torres Antonio
Director de la Licenciatura en Ciencias Políticas de la UPAV
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