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Distinguido auditorio, ciudadanos diputados y ciudadanas
diputadas:
Hoy es un día histórico para Veracruz.
Es el día de la alternancia.
Quedan atrás 86 años de gobierno del mismo partido y comienza una
nueva historia.
Tendré el alto honor de encabezar un gobierno de coalición.
Un gobierno sustentado en un programa de cambio profundo para
rescatar a Veracruz, en el que se conjugan los principios de
doctrina del Partido de Acción Nacional y las luchas históricas del
partido de la Revolución Democrática.
Nos comprometimos con los principios básicos de ambos partidos:
luchar “Por una patria ordenada y generosa y una vida mejor y más
digna para todos” y por lograr “Democracia ya, Patria para
Todos”.
Con éste programa y con éstos principios logramos la confianza de
la mayoría de los electores y hoy estamos comprometidos a llevarlos
a la realidad.
El de coalición es un gobierno plural, con una integración
histórica en cuanto al número de mujeres y la participación de
ciudadanos de diversa militancia o sin militancia partidista.
Es el gobierno del cambio, y en esa medida buscaremos cambiar todo
lo negativo para comenzar una nueva etapa.
Un gobierno basado en la ética, la transparencia y la austeridad
total.
Cambiaremos el discurso político y hablaremos a la sociedad siempre
claro y con la verdad.
Por ello mi intervención ante ustedes tiene que ir en consonancia
con lo que demandan los veracruzanos y lo que merecen saber.
No puede ser el discurso acartonado de rendición de protestas y de
enumeración de propósitos, proyectos y buenos deseos.
Asumo que es un discurso de cambio de régimen, que debo hablar del
presente con crudeza y del futuro con objetividad y
optimismo.
Hay una exigencia de cambio profundo y a esa exigencia
respondo.
El pueblo de Veracruz exige solución a sus problemas pero demanda
también castigo a quienes lo provocaron.
Habrá castigo, con toda la severidad de la ley y con la fuerza
moral de quienes no fuimos cómplices y tuvimos el valor de
denunciarlos y enfrentarlos. Habrá castigo.
Quiero informar al pueblo de Veracruz lo que hice y lo que ya hemos
logrado en el combate al grupo delincuencial que se apoderó del
gobierno de Veracruz y provocó la crisis que vivimos.
Antes de informar sobre los resultados les pido me permitan hacer
algunas reflexiones y un poco de historia sobre lo sucedido en los
últimos años
Desde hace 12 años advertí que Veracruz había caído en manos de una
banda y tomé la decisión de combatirla.
Lo hice por dos vías. La denuncia pública y la investigación
privada, personal.
Dediqué muchas horas de mi vida a documentar lo que empezaba a
suceder en Veracruz.
Logramos penetrar la corrupción del régimen hasta la misma
médula.
Lo hicimos sin más armas que el valor y la decisión de luchar por
el bien de Veracruz.
Largos años, investigamos todos los brazos de esta mafia que se
apoderó de nuestro estado, y encontramos que eran
extraordinariamente grandes y poderosos.
Mafia que se vinculó desde el 2004 con la delincuencia organizada,
que le dio entrada por la puerta grande de Veracruz a cambio del
pago de millones de dólares.
Gobierno y delincuencia organizada mezclados, mejor dicho, gobierno
al servicio de la delincuencia organizada y gobierno de
delincuentes organizados. No lo digo sólo yo, así lo señala también
la Procuraduría General de la República que ya los persigue.
Por eso Veracruz empezó a caer desde hace 12 años en un espiral de
violencia y corrupción imparables.
En el 2010 los enfrentamos en las urnas, pero el dinero sucio y
toda la maquinaria del Estado impidieron en ese momento la
alternancia.
Este año, en 2016 -cuando decidimos enfrentarnos nuevamente- lo
hicimos a sabiendas de los riesgos que correríamos mi familia, mis
compañeros y yo.
En la campaña electoral se expresó todo el poder de la delincuencia
en contra nuestra.
La delincuencia de dentro, la de Palacio de Gobierno, y la de
fuera, que les apoyó con todo.
La guerra sucia en que nos sometieron no tiene parangón en campaña
política alguna.
Hicieron un daño enorme a mi familia.
No sólo las ofensas, calumnias y agravios de todo tipo, sino -lo
más grave- los pusieron en peligro, en grave peligro.
Pero resistieron todo, y me apoyaron con todo, la mejor forma de
agradecer a Lety, a Paty, a Angela, a Marielita, a Miguel Ángel, a
Omar, a Fernando, es heredar un buen nombre a mis nietos a María, a
Hanna, a Isabel, a Santiago, a Álvaro, a Miguel Ángel, y a los que
seguramente pronto vendrán, así lo haré les heredaré un buen
nombre.
Para garantizar impunidad y encubrir el atraco era indispensable
que no hubiera alternancia en Veracruz, que no ganáramos las
elecciones.
El triunfo de la democracia y la alternancia dejaron al descubierto
de manera descarnada la corrupción que azotó al pueblo
veracruzano.
La democracia nos mostró cómo un pequeño grupo, cuando no tiene
controles institucionales, ni personales, puede lastimar la vida de
millones de personas.
La democracia y la alternancia serán también la mejor garantía de
que eso no suceda nunca más.
Después de la elección vivimos meses aciagos.
Trataron de impedir que tomara posesión y continuaron la guerra,
con todo los recursos, con toda la potencia.
No pudieron doblegarme.
Por el contrario decidimos ir más el fondo de la corrupción,
presentar denuncias y exigir que se procediera legalmente.
Ante la inacción de la Fiscalía General del Estado, acudí a la
Procuraduría General de la República para aportar datos y decidí
actuar personalmente enfrentando los cómplices del hoy
prófugo.
Con información indubitable y datos sobre sus debilidades
personales me di a la tarea de buscarlos y encararlos.
Pero antes hicimos pública parte de la información, para que
supieran que sabíamos.
Empezaron entonces a caer las primeras fichas en el tablero.
Renuncia de funcionarios cómplices que se sintieron descubiertos y
que corrieron en búsqueda de los despachos de defensores más caros
del país.
Se empezaron a derrumbar las murallas que protegían al castillo de
la corrupción.
Me di a la tarea de buscar uno a uno.
Logré poner frente a mí al responsable del diseño de las
estructuras financieras para lavar el dinero que robaban a los
veracruzanos.
Me relató cómo le hacían para meter al sistema financiero cientos
de millones de pesos cada mes, cientos de millones de pesos cada
mes.
Yo sabía el origen del dinero, -era dinero de los veracruzanos-, él
me detalló el destino de los recursos.
Buena parte, no todo, fue a parar a las bolsas de Javier Duarte y
su banda.
“Yo era el responsable de la tubería para llevar el dinero de un
lado a otro, pero la tubería estalló porque le metimos demasiado”,
me dijo con cinismo.
Me pidió piedad porque debía llevar a Houston a su hijo
enfermo.
Le hice sentir que era una vileza, que mientras él usaba recursos
de los veracruzanos para llevar a su hijo a curarse al extranjero,
niños veracruzanos habían muerto porque ellos habían robado el
dinero de sus medicamentos.
Hablo de Juan José Janeiro, uno de los cerebros financieros de la
banda.
Me dio información y entregó bienes, de los cuales daré cuenta y
los pondré a disposición del pueblo de Veracruz.
Hoy es prófugo de la justicia.
En Canadá localicé y senté frente a mí a Moisés Manzur, uno de los
personajes centrales en esta historia de corrupción brutal.
Su relato del cual tengo constancia, como del relato de todos que
son historias de impunidad y cinismo sin límite.
Quizá lo menos relevante sea que pagaban los gastos de la familia
del prófugo con recursos del gobierno.
O que compro para él rancho, departamentos, edificios, aviones,
coches, caballos, obras de arte, joyas, hasta lo no
imaginable.
Todo me provocó repulsión, pero en particular el relato de cómo
negociaban lo relativo a los servicios de salud, medicinas y
seguros contra desastre naturales.
No les importó que estuvieran en juego vidas humanas.
Me quedó claro que Duarte y su banda actuaron sin ningún escrúpulo,
sin freno alguno, seguros de que continuaría la cadena de impunidad
que los había unido desde que se inició el gobierno de Fidel
Herrera.
Ya recuperamos parte de lo robado por Mansur.
También daré cuenta de ello.
Logré que varios más devolvieran bienes y recursos.
Lo hicieron por distintas vías, de distintas maneras, todas
legales.
Lo importante era y sigue siendo recuperar el dinero que le robaron
al pueblo de Veracruz y sancionar a los culpables.
Quiero dejarlo muy claro, lo hice siendo gobernador electo, sin
tener poder alguno, sin la fuerza del estado y sin comprometerme a
nada, absolutamente a nada.
No olvido, no perdono, no amnistía, al contrario toda la fuerza de
la ley para sancionarlos y recuperar el resto de lo ilícitamente
sustraído.
A todos los persigue ya la autoridad federal y lo mismo hará de
manera implacable la Fiscalía General del Estado.
Seguiré aportando a las autoridades toda la información que tengo
en mi poder.
Nos reservaremos una, solamente un tema para investigarlo
directamente con la mayor profundidad, el destino final de miles de
millones de pesos, que se trasladaban en helicópteros oficiales
para ser entregados en un edificio que ya tenemos localizado en la
zona conurbada de la ciudad de México.
La Fiscalía General del Estado profundizará en esta
investigación.
Honorable Congreso del Estado, pueblo de Veracruz.
Con enorme satisfacción informo a ustedes que hemos logrado
recuperar bienes muebles, inmuebles y recursos por un valor
superior a mil 250 millones de pesos que habían sido robado a los
veracruzanos.
Entre los inmuebles se encuentra El Faunito, una enorme residencia
con más de 60 mil metros de terreno en el municipio de Fortín de
las Flores, con un valor superior a los 200 millones de
pesos.
Ya es de los veracruzanos.
Aquí está la escritura pública.
Esta mañana informo a ustedes, que esta mañana, al asegurar el bien
encontramos cuadros que parecen ser de gran valía, de Botero,
Tamayo y Siqueiros entre otros.
Ya están bajo resguardo, en este momento están siendo trasladados a
la Fiscalía General del Estado para que se haga una valoración y se
determiné si son originales, y en su caso sea la propia Fiscalía la
que los resguarde.
Entrego también al pueblo de Veracruz una tercera parte del Rancho
Las Mesas, ubicado en Valle de Bravo, Estado de México, mismo que
tiene un valor de más de 300 millones de pesos.
Ya es de los veracruzanos.
Aquí está la escritura pública.
Las dos terceras partes restantes las ha asegurado la Procuraduría
General de la República con el compromiso de transferirlas al
Gobierno del Estado de Veracruz una vez concluido el proceso
legal.
Entrego al pueblo de Veracruz un paquete de bienes muebles e
inmuebles ubicados éstos últimos en Xalapa, Coatepec, Alvarado y
otras poblaciones del Estado.
Ya son de los veracruzanos, aquí están las escrituras
públicas.
Como parte de este paquete entrego al pueblo de Veracruz un avión
Learjet 45 y un helicóptero marca Robinson.
El avión Learjet tiene un valor de adquisición de 3 millones 700
mil dólares, equivalente a 75 millones de pesos.
El helicóptero Robinson tiene un valor de adquisición de 871 mil
dólares, equivales a casi 18 millones de pesos.
Ya son de los veracruzanos están en nuestros hangares.
En este caso el compromiso es devolver 250 millones de pesos en
bienes y efectivo.
Esta es apenas la primera parte.
Entrego al pueblo de Veracruz 421 millones de pesos, que recuperó
la Procuraduría General de la República, tomando elementos de
información que aporté.
Reconozco al Procurador Raúl Cervantes, su eficaz intervención, es
hombre recto, de palabra.
Aquí esta el cheque por los primeros 250 millones de pesos.
Ya son de los veracruzanos; pudimos recuperarlos.
Aquí hay 300 millones de pesos más, en estos documentos que se
harán efectivos en las próximas semanas por empresarios con los que
llegamos a acuerdos legales, reitero, acuerdos legales.
Todos estos bienes y recursos serán transferidos a un fideicomiso
público que constituiremos en las próximas semanas, y en el que
tendrán una amplia representación la sociedad veracruzana y
organismos de transparencia.
Invitaré a este Congreso a designar a un representante.
Los recursos ya recuperados y los que se sumen como consecuencia de
las acciones legales que emprenderemos serán destinados
fundamentalmente a concluir y rehabilitar clínicas y hospitales, en
particular los especializados en la atención de niños y los
ubicados en zonas marginadas.
El pueblo de Veracruz podrá ver materializada en obras de beneficio
colectivo la lucha contra la corrupción que iniciamos antes de
tomar posesión y que redoblaremos a partir del día de hoy.
También informo a ustedes que esta misma madrugada suscribí un
documento, ordenando a la Secretaría de Gobierno y de Finanzas que
inicien los procedimientos para recuperar, 60 hectáreas de la
reserva territorial de Coatzacoalcos, que fueron indebidamente
cedidas por el exgobernador Fidel Herrera Beltrán a Antonio Macías
Yazegey, suegro de Javier Duarte, el valor estimado de esta reserva
es de casi mil millones de pesos.
Igualmente he instruido se presenten las denuncias penales
respectivas contra el exgobernador Fidel Herrera Beltrán y en
contra de los demás beneficiarios de este atraco al patrimonio
público de los veracruzanos.
Esta madrugada suscribí también un documento ordenando a las mismas
dependencias, se inicie el procedimiento para expropiar por causa
de utilidad pública la residencia adquirida por Javier Duarte en
Tlacotalpan con recursos de los veracruzanos.
Una vez que he rendido protesta ante ustedes refrendaré ambos
documentos.
Reitero mi solicitud al gobierno federal para que todos los bienes
que sean recuperados con motivo de las acciones que han emprendido
en contra Javier Duarte y su banda, sigan siendo devueltos al
pueblo de Veracruz, que es su legítimo dueño.
Con las acciones que llevamos a cabo antes de asumir el cargo, sin
tener ningún instrumento de poder, queda acreditado que la
corrupción se combate con leyes, pero más que nada con voluntad y
con firmeza, con valor y con decisión.
Me siento muy orgulloso de haberlo logrado, desde antes de tomar
posesión empezamos a hacerle justicia al pueblo de Veracruz.
A partir de hoy, ya con la fuerza del gobierno haremos todo, todo
lo que sea necesario para que quienes llevaron a Veracruz a esta
crisis, paguen las consecuencias y sean castigados con toda la
severidad de la ley.
Ciudadanas diputadas, ciudadanos diputados, pueblo de
Veracruz
Hoy, que Veracruz aparece sólo como referente de corrupción, de
violencia, pobreza, ingobernabilidad y desorden, tomo la voz en
nombre de todos los veracruzanos, de todos los veracruzanos de
bien, para decirle a México y el mundo que eso no es
Veracruz.
Que no se confunda la crisis aguda provocada por malos gobiernos
con el ser, con la esencia de Veracruz.
Veracruz es síntesis de la historia de México.
Aquí floreció la cultura desde épocas inmemoriales.
Ahí está la expresión artística y científica de los totonacas,
olmecas, huastecos y otras etnias, en la majestuosidad y perfección
matemática de Tajín y Zempoala, en la belleza de las cabezas
monumentales de San Lorenzo.
En la expresión sonriente de las caritas remojadas.
Aquí entró y salió la conquista.
San Juan de Ulúa es historia viva de ello.
Aquí capituló el imperio; Córdoba dio sede y testimonio.
Aquí se cobijó la república jurista y se promulgaron las Leyes de
Reforma.
Aquí también culminó la Revolución Mexicana con la promulgación de
las Leyes Agrarias en 1915.
Veracruz fue ejemplo de resistencia heroica contra el invasor, de
la misma manera en que ha sido puerta abierta y generosa a
distintas migraciones.
Veracruz es pasado, presente y futuro.
Veracruz es la majestuosidad de sus montañas, del Pico de Orizaba y
el Cofre de Perote, desde donde se ven sus más de 700 kilómetros de
mar igualmente bello y majestuoso.
Veracruz son sus llanuras costeras, sus ríos y lagunas, sus
manglares, sus bosques, sus dunas.
Veracruz es potencia agropecuaria y pesquera.
Es agroindustria azucarera, café, naranja, limón.
Es petróleo, gas, petroquímica, metalurgia, energía eléctrica,
energía nuclear.
Veracruz son sus puertos, sus aeropuertos, sus carreteras y
autopistas que son arterias hacia el norte y sur de la
república.
Veracruz es su Universidad Veracruzana, sus tecnológicos, sus
universidades privadas.
Es ciencia y tecnología, es arte y cultura.
Veracruz es su gastronomía, su música, sus fiestas, sus
carnavales.
Pero más que nada, más que todo, Veracruz es su gente.
Es Agustín Lara con su canto a la mujer; es la voz fuerte y cálida
de Toña la Negra; es Díaz Mirón con su poesía encendida, es Sergio
Pitol con sus literatura mágica, es Teodoro Cano con sus murales en
lo que vive la historia.
Es la cadencia de los danzoneros del zócalo.
Es la música de Tlen Hui Cani que suena a mar, llanura y
montaña.
Es el canto agudo y nostálgico del son huasteco.
Veracruz es el zapateo armonioso del son jarocho que recuerda la
raíz española.
Es la tercera raíz, la negritud presente también en nuestra
cultura.
Veracruz es el simbolismo, valentía y belleza de los voladores de
Papantla.
Veracruz es futuro, son sus jóvenes, campesinos, obresos,
universitarios.
Veracruz es mucho más, pero mucho más que una crisis.
Veracruz somos 8 millones de seres humanos que vemos el mañana con
optimismo, que tenemos el mismo coraje, decisión y valentía que los
ancestros.
Con gran esfuerzo, con sacrificio, con voluntad, con Veracruz
comenzará desde hoy a escribir una nueva historia.
Con toda la fuerza, con todo el optimismo, con toda la energía, con
todo el entusiasmo, con toda la alegría, digamos desde el fondo de
nuestro corazón que hoy Veracruz comienza.
Que saldremos de la crisis.
Que habrá un mejor futuro.
Que nada nos detendrá.
Que Veracruz vive.
¡Que viva Veracruz!
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® 2013 ENTORNO POLÍTICO |