El descaro no puede ser más elocuente y que bueno que enseñen el cobro a tiempo para que no haya duda de sus conductas- aunque se presumen que son deshonrosas y deshonestas-, pues en tanto el dirigente del Partido Acción Nacional,  que nació para sepultar las reformas del general Cárdena y  tiene a su familia en un país extranjero y él viaja cada semana, la dirigente del Partido de la  Revolución Democrática. Alejandra Barrales  que, de azafata, es ahora  una enriquecida en exceso  por los distintos cargos que ha ocupado y que será difícil que explique o justifique su cuantiosa fortuna,  acuerdan un frente opositor no para expulsar al PRI  de la presidencia de la república, sino  para que no se dé un cambio profundo y verdadero en el país, es decir, que el cambio sirva para que todo siga igual.

Si bien es  el cinismo  lo que caracteriza a esos dirigentes, hay que esperar para ver si sus cuadros lo acatan  porque ya se vio  y existen pruebas elocuentes, que Vicente Fox Quezada y Felipe Calderón Hinojosa en lugar de consolidar el cambio que se esperanzaba, todo quedó en mera farsa y en peores  condiciones, pues si los prístas  son y han sidos  bandidos consumados  en el ejercicio del servicio público, al menos había recato, en tanto los panistas se fueron a fondo y con su doble moral que les caracterizan, hundieron en la miseria al país y  lo convirtieron en un cementerio nacional.

La convocatoria  panperredista  tiene dedicatoria clara y precisa, pues si ya en dos ocasiones  despojaron el ascenso de López Obrador, ahora buscan, en su desesperación que el candidato sea una personas ajena a toda corriente política, es decir, un patiño  que venga a realizar el trabajo sucio, pues mediante la simulación que ha permeado el país, no llegar a  atacar de fondo la crisis de la miseria sino a paliarla solamente y que la explotación, la ignorancia  y sus consecuencias lógicas, el desempleo, la criminalidad , etcétera continúe para que sigamos teniendo  un estado fallido como es que  hoy encabeza Peña Nieto y a rio revuelto “ganancia de pescadores”.

Si en verdad  se quisiera una alianza auténtica y efectiva, para sepultar el PRI,  sin duda  que se hubiera dado en las elecciones  del próximo cuatro de junio,  entre  el PAN y el PRD en todas los lugares donde hay elecciones , pero  más en el Estado de México,  emblemática entidad  por ser el centro corruptor más importante del país con los regímenes recientes de Montiel, Peña Nieto y Eruvil, por ser  lo todo  simulación y si   el despertar no se da en las elecciones que se celebraran  próximamente  y se continua así en 2018 el país no tendrá salida que augure una transformación auténtica y se seguirá  en  peones condiciones.

La convocatoria sospechosa que hoy se anuncia  viene acreditar que el partido de la revolución democrática está alentando aún más su división interna y en  el fondo, como esquirol del sistema político nacional por considerarse  como un partido de avanzada, y en los hechos demuestra lo contrario, pues sabedor que su candidato en el Estado México no tiene posibilidades de triunfo, al  cuarto para las doce  alimenta la desconfianza, pues en todo caso, de inmediato debería recomendar  el  retiro de su candidato  y aliarse a la   panista  para que la ciudadanía defina sus preferencia  por tres opciones : Morena, PRI Y PAN,  de lo  contrario está participando de un juego sucio y el tiempo lo habrá de demostrar.

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