Las reformas constitucionales emprendidas el año pasado y cuya legislación secundaria está a discusión en el Congreso de la Unión, son detonantes del crecimiento económico, el desarrollo y el progreso de los mexicanos, aseguró el presidente Enrique Peña Nieto.

Al inaugurar en este puerto las obras de remodelación de la planta de aguas residuales “El Crestón” y, de manera remota, la planta “Culiacán Sur”, el mandatario anticipó que a partir del progreso que generen las reformas estructurales se empezarán a observar obras y acciones que beneficiarán a todos los mexicanos.

Acompañado por el gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez, y los secretarios de Agricultura, Enrique Martínez, y de Medio Ambiente, Juan José Guerra, el Ejecutivo federal subrayó que el desarrollo no debe ser el privilegio de algunos cuantos.

Por eso se han realizado las reformas, para garantizar un crecimiento armónico y homogéneo entre todas las regiones del país y evitar que haya diferencias en el nivel de desarrollo entre las regiones sureste y norte de la nación.

Respecto a las obras del gobierno federal en beneficio de Sinaloa, el presidente de la República destacó estas plantas de tratamiento con las que se logra procesar ciento por ciento de las aguas residuales en esa entidad.

También está en marcha el libramiento de Mazatlán, con una inversión de mil millones de pesos, y la modernización de la Carretera Interregional Culiacán–Parral, con mil 400 millones de pesos.

Para garantizar la producción agropecuaria, además, está en proceso de inicio la construcción de la presa Santa María, que costará seis mil millones de pesos y se modernizarán los bordos de los canales de riego con un costo de mil millones de pesos, detalló.

Peña Nieto también habló sobre la importancia del cuidado del ambiente y en particular en materia de agua.

Al respecto instruyó al director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), David Korenfeld, a hacer una revisión integral de las plantas de tratamiento de agua en el país para asegurar la viabilidad de todas y que cada una cumpla con el objetivo para el que fue construida.

La revisión, que es necesaria porque muchas plantas dejan de funcionar cuando es cara su operación o tienen mala administración, permitirá asegurar que el país trate la mayoría de sus aguas y se acredite en el mundo como una nación responsable en materia ambiental.

El presidente Peña se congratuló de la información presentada por el gobernador en el sentido de que Mazatlán logró plena ocupación hotelera durante la Semana Santa y aseguró que eso se debe a que se trata de un destino turístico de clase mundial.

Respecto a las dos plantas de tratamiento inauguradas este miércoles, Korenfeld Federman especificó que con ellas Sinaloa llega a ciento por ciento del tratamiento de sus aguas residuales, luego de que la Federación invirtió 227 millones de pesos para remodelar la plata de El Crestón, inaugurada en 1984 y que hoy devuelve agua limpia al mar arrastrando 900 litros por segundo.

De la planta Culiacán Sur, especificó que tuvo una inversión de 133 millones de pesos y da tratamiento a las aguas residuales de 140 mil habitantes y cuyas aguas tratadas se utilizarán en 700 hectáreas de cultivo, aunque en el futuro se puede incrementar hasta mil 500 hectáreas.

El director de Conagua se refirió también al planteamiento que le hizo el gobernador Mario López para dotar con 100 millones de metros cúbicos de agua, para abastecer a 45 mil hectáreas sembradas con sorgo.

David Korenfeld Federman se comprometió a estudiar la propuesta, aunque aclaró que esta iniciativa sólo se podrá realizar si primero se garantiza el uso humano.